Las Pruebas Nacionales mantienen atrapados al 17% de los estudiantes convocados para examinarse, de los que 54 mil 390 pertenecen a Media y 3,024 a Técnico, sin que hasta el momento el Ministerio de Educación presente una alternativa para que éstos puedan seguir sus estudios universitarios.
De los estudiantes de Media con materias pendientes convocados, 21 mil 888 deben Matemáticas, 16 mil 999 Ciencias Naturales, 15 mil 824 Español y 13 mil 186 Sociales. Del nivel Técnico deben Matemáticas 1 mil 174, Ciencias Naturales 871, Español 666 y Sociales 660.
De ese 17% de estudiantes, se estima que más de la mitad han asistido a por lo menos dos y tres convocatorias, no pudiendo superar las pruebas.
La situación de esos estudiantes es incierta, pues el Ministerio de Educación no les presenta ninguna alternativa que les permita continuar estudiando, ya que el principal requisito para ingresar a una carrera universitaria es presentar una certificación de bachiller, lo que no es posible obtener si no se superan los exámenes de las cuatro materias básicas que abarcan las Pruebas Nacionales: Matemáticas, Ciencias Sociales, Ciencias Naturales y Español.
Durante la gestión 2000-2004, la exvicepresidenta de la República y secretaria de Estado de Educación Milagros Ortiz Bosch dispuso mediante orden departamental que a los estudiantes que les hicieran falta hasta cuatro puntos para superar un examen fueran favorecidos otorgándoselos.
Con ello, la gestión buscaba bajar lo que parecía una tendencia hacia arriba del número de estudiantes que se quemaba en una o más de una de las asignaturas examinadas.
Ejemplo del fracaso
Si se asume como válido el concepto de que las Pruebas Nacionales son un indicador de la calidad del sistema educativo, entonces habría que pensar en si ha fracasado o no un sistema que no puede ocultar el hecho de que más de la mitad del 17% de los estudiantes convocados a las presentes pruebas nacionales que inician hoy hayan reprobado en más de dos ocasiones.
Y es que aunque las Pruebas Nacionales no representan la totalidad de la realidad de la calidad de la educación dominicana, ya que se entiende que la calidad es un concepto polisémico y que abarca distintos aspectos, estos exámenes sí son un indicador importante que proporciona información valiosa sobre el logro de aprendizaje, sobre la equidad, y la eficacia del sistema educativo.
Ángel Hernández, exvicesecretario docente durante la gestión de Ortiz Bosch, entiende que los resultados de las Pruebas Nacionales determinan que se hace necesario repensar el sistema educativo, ya que lo importante es lo que pasa en el proceso en el sentido de si los estudiantes han asimilado bien los conocimientos planteados en las aulas.
Factor estudiantil
Sin embargo, para la profesora de 8vo. grado Quilina Castillo, uno de los principales problemas para superar las Pruebas Nacionales es que hay mucho desinterés por parte de los estudiantes y mucha dejadez e irresponsabilidad en los padres.
Observa que en el caso de su escuela, El Despertar, ubicada en Alma Rosa II, para las presentes pruebas muchos no estudiaron ni hacían sus tareas.
“La situación es frustrante”, dice, a la vez vaticina que este año se van a quemar mucho más que en años anteriores.
“Le di un 99% de los contenidos, pero lo que se observa en el estudiantado es que hay poco interés por parte de los estudiantes y es otra cosa lo que le llama la atención”.
Visión oficial
Para Ancell Scheker, directora de Pruebas Nacionales, “los resultados cada año generan debates y reflexiones. Desde el 2011 se entrega a cada centro educativo un informe individual que analiza sus resultados particulares en cada una de las áreas: Lengua Española, Matemática, Ciencias Sociales y Ciencias de la Naturaleza, y este reporte lo consideramos fundamental porque es en el centro educativo donde mayormente ocurre el aprendizaje y donde se requieren introducir los cambios y mejoras”.
Educación debe buscar una salida a los rezagados
El exvicesecretario docente durante la gestión educativa 2000-2004, Ángel Hernández, considera que el Ministerio de Educación debe buscar una solución que permita que los 57,414 estudiantes rezagados en las Pruebas Nacionales puedan continuar sus estudios. Señala que esa gran cantidad de fracasos en las pruebas se produce a pesar de que las escuelas y colegios otorgan un colchón de 70 puntos a los estudiantes, lo que les facilita superarlas. Sostiene que el problema de las pruebas nacionales es que son evaluaciones que se hacen al final del proceso, y eso provoca que sean más una prueba de promoción y no están teniendo impacto en el mejoramiento de la calidad de la educación, y por eso es que es necesario que se conviertan en prueba de diagnóstico y se coloquen en puntos diferentes del ciclo escolar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario