Imagino la preocupación y el empeño que deben tener Leonel Fernández y Danilo Medina por mantener unido el Partido de la Liberación Dominicana. En la tradición machista existe el dicho de que “en este gallinero no puede haber dos gallos, o mandas tú o mando yo”. En el PLD, ¿estará pasando lo mismo? Lo que está a prueba es la capacidad de estos hombres de manejar sus recursos emocionales, de administrar las inevitables presiones.
Hasta ahora, sus habilidades han permitido superar situaciones con algún potencial de conflictividad al interior de su partido. Pero, ¿hasta cuándo? Es casi seguro que el próximo “match” podría presentarse en la reunión del Comité Político del PLD hoy lunes, cuando esa organización debe seleccionar sus candidatos a dirigir las Cámaras Legislativas a partir del 16 de agosto. Pero esa, aunque es caliente, no es una prueba de fuego. Leonel y Danilo son dos y dos son las posiciones a repartirse y de manera conveniente han de llegar a algún acuerdo. Además, han tenido pruebas más duras, como las elecciones del Comité Central y el Comité Político, y aunque ambas pruebas generaron escozor, no brotaron heridas visibles.
Lo fuerte ha de venir al momento de seleccionar el candidato presidencial. No hay señales palpables de que esa elección pueda dar lugar a un pugilato entre ellos. Danilo no da muestras de embarcarse en una reforma constitucional para reelegirse y Leonel sigue esperando “el soplar de los vientos”.
Mientras tanto, entre aspirantes y seguidores cercanos están cruzando algunos mensajes que podrían poner en riesgo el escenario en que cohabitan los dos gallos. ¿Qué pasaría si en una eventual precandidatura de Leonel contra aspirantes proclives a Danilo, éste maneja sus fuerzas y Fernández sale derrotado? Ya se vivieron procesos internos y Fernández no se llevó la mejor parte, fruto de las fuerzas exhibidas por Medina.
¿Qué le espera a Fernández en el PLD si siendo presidente de ese partido es derrotado en unas primarias? Con cuatro años más de gobierno dirigido por las fuerzas de Medina, en un proceso de reestructuración, su presidencia del PLD sería incierta y ni hablar de la candidatura por ese partido para el 2020.
Fernández debe estar bien persuadido de la dirección de los vientos cuando le corresponda tomar una decisión sobre el 2016, pues una derrota a ese nivel significaría el fin de su liderazgo en el PLD. Y él está muy joven para abandonar la política.
Leonel ha sido tres veces Presidente del país
Cuando Leonel Fernández fue juramentado presidente el 16 de agosto de 1996, en sucesión de Joaquín Balaguer, se convirtió en el primer jefe de Estado surgido del PLD y uno de los más jóvenes estadistas de Latinoamérica. Tras su partido perder las elecciones presidenciales en el año 2000, regresó al poder en 2004 y se reeligió en el 2008. Entregó el poder en el 2012 al actual presidente Danilo Medina, quien manejó las estrategias utilizadas por Fernández para obtener los dos primero triunfos electorales.
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