MANAGUA, Nicaragua.- El Zoológico de Nicaragua intentaba alimentar a la fuerza a un cocodrilo de 35 años, que perdió el apetito hace varios días a causa del estrés y el maltrato que recibía antes de que llegara al parque desde su antiguo alojamiento.
El cocodrilo “está en un estado anoréxico porque perdió el apetito”, aunque “logré abrirle las tapas (fauces) para introducirle carne de res”, contó el veterinario del Zoológico Nacional de Nicaragua, Eduardo Sacasa, a la AFP.
El reptil de 3,4 metros de largo, pesa apenas 68 de los 136 kilos que debería tener con su tamaño, dijo el veterinario, quien colocó al animal suero intravenoso para hidratarlo, en una de las piletas del Zoológico, al sur de la capital.
“Ojalá que se recupere, pero para mí es difícil”, porque “está estresado, débil, no quiere comer” y tiene un 75% de desnutrición, expresó Sacasa.
El cocodrilo fue trasladado hace dos días al Zoológico desde Puerto Corinto, en la costa del Pacífico, donde pasó varios años dentro de una pileta de agua del parque de la ciudad, para ser exhibido al público sin mayores cuidados.
Recientemente las autoridades de medio ambiente se dieron cuenta del maltrato que sufría el reptil y lo trasladaron al Zoológico.
“No se mueve, ni siquiera abre los ojos”, lamentó el veterinario.
En Nicaragua los cocodrilos se reproducen en grandes cantidades en el Lago Xolotlán de Managua y en el río San Juan, fronterizo con Costa Rica.
Fuente: noticiassin.com
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