CALERO, VILLA DUARTE.- De Hipólito Mejía se puede pensar lo que se quiera, pero no puede negarle que que es un dirigente que tiene ángel, que le gusta a los suyos y que los pone a vibrar.
No es como Leonel Fernández, quien luce una persona de modales muy finos e incapaz de romper un vaso.
Mejía demostró la noche de este día jueves 16 de junio en el Club Calero, que sintoniza con los suyos, con quienes tiene empatía.
El Club Calero se estremeció con la multitud de perredeístas que creen más cerca el momento en el que dejen de pasar hambre.
Mejía, un tipo que no utiliza palabras rebuscadas para dar sus discursos, sino que se aferra a expresiones campesinas, rústicas, sin pulir, volvió al refranero popular para darse a entender a su manera.
Y la gente le entendió. Se alteró y subieron las banderas blancas.
-"¡Llegó Papá! ¡Llegó Papá!", gritaban y saltaban con el mismo entusiasmo que lo hacen los evangélicos cuando gritan como si estuvieran poseídos:
-"¡A su nombre! ¡Gloria!, ¡A su nombre! ¡Gloria!".
Llegado el momento, alcanzaron el clímax. Estaban atrapados por la euforia de los que se creen triunfadores.
Mejía, que visitó Santo Domingo Este para juramentar su equipo de campaña "unificado", aceptó el tono burlón usado un día antes por Leonel Fernández, y le devolvió con la misma moneda.
-"No Leonelito", dijo refiriéndose al presidente Fernández, de quiern aseguró quue "corrió como un caballo" para escapar de la crisis.
Aludía así el viaje al exterior que inició Fernández por distintos países.
Antes de dar su discurso, mientras algunos de los que dieron daban los suyos, Mejía tomó un lapicero y un troz de papel.
En este escribió algo. Luego colocó la tapa del lapicero y se lo guardó.
Cuando le correspondió su turno de hablar a la multitud, llevó el papel en sus manos y lo abrió junto al micrófono.
Con su clásico estilo rural, comenzó a hablar. Las ideas centrales las extraía del papel en el que había hecho los apuntes.
-"El alto costo de la vida, la onseguridad ciudadana, el desempleo, la corrupción y los problemas eléctricos, son los problemas que en estos momentos el pueblo dominicano le endilga a Leonel Fernández y al PLD", dijo Mejía. Parecóa "un libreto".
Hacía lo mismo que hizo hace poco Luis Henríquez cuando daba un discurso en Villa Duarte. Leía sus apuntes para no equivocarse.
Leonel y Danilo Medina, al contrario, llevan sus apuntes "en la cabeza".
Después de leer sus apuntes, Mejía abandonó el papelito y volvió a ser el mismo Hipólito de siempre, irreverente, cherchoso y campechano.
-"Leonel se fue hoy a volaaaar para España, y anda voLANDO por allá; ¡ y vueeeela para allá! ¡Y vueeeela para Israel"; "¡Y vueeeela para Palestina!....".
Cuando lo decía, los perredeístas se levantaron de sus asientos mientras el espacio era inundado con los ruidos de tambores.
A seguidas afirmó que "cuando la piña se pone agria aquí, se manda como un caballo".
-"Noooo Leonelito; nooo. No es cuestión de cu currrucucú paloma, nooooo. Es cuestión de enfrentar aquí el alto costo de la vida y el desmpleo, es enfrentando el grave problema que tiene la juventud, la mujer los agriculturores " y los chiriperos, precisó.
Criticó que Fernández no enfrente la inseguridad ciudadana y el miedo que padece la población ante la delincuencia.
Tildó de "irresponsabilidad" y "cobardía" las actuaciones del gobierno frente a esos factores sociales.
Mejía, conocedor de la sicología de las bases de su organización que gustan de sus actuaciones, les dio la "receta" para vencer al PLD y les dijo que :
-"El PRD unidooooo, el PRD unidooooo", mientras la multitud gritaba "jamás será vencido".
No hubo conceptualizaciones ni alusiones a la crisis financiera internacional.
Mejía no habló del 15M (en España), ni de la crisis en Grecia, las protestas en Inglaterra, Francia e Italia ni de las dificultades de Estados Unidos para honrar sus compromisos con la banca internacional como hace Fernández.
Nada de eso. Mejía se metió en la piel de los perredeístas y los alentaba a la unidad.
Poco después, se burló de todos los pre candidatos del PLD que se han retirado de la carrera por la nominación presidencial y criticó al Vice Presidente Rafael Alburquerque al recordarle que la terjeta Solidaridad fue una creación del PRD.
Antes de finalizar la actividad, Mejía juramentó su equipo de campaña y le envió abrazos a los jóvenes, a las mujeres y a los tigres.
¡Ah! Mejía llegó al lugar cuidado con celo y con mimo por Pepe Goico.
Fuente. gentetuya.com
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